El país de los Rolex

 Son bonitos, para qué les digo mentiras...

Aprovechando que en éste país la doble moral aún no puede aclararnos si es malo ser puta o ir donde las putas, que Dania tiene un perfil para suscriptores en Facebook (toda una putería), que los cupos de "Criminalística" en el ICJ aumentaron y que los senadores se incrementan salario y pensión por trabajar 3 días a la semana argumentando que acá podemos sobrevivir de la manera más zarrapastrosa con 190 mil pesos al mes, pues, hablemos de ¡Rolex! el reloj que nunca tendrán ustedes mis queridos 22 seguidores... y yo tampoco.

Dicen que Raúl Reyes, el que luchaba "en nombre del pueblo" tenía uno pero salió chimbo o chiviado (la misma cosa).

O que el "Mono Jojoy", otro que luchaba por "el pueblo" tenía uno.

Y que un Fiscal recibió uno de esos de parte de un empresario dudoso que estaba bajo investigación.

Ahora lo que faltaba, el exministro Londoño en su afán de seguir mojando pantalla cual moja cuco acusa a un servidor cuyo único pecado fue ir a socorrerlo - para no tener que aguantar su fea cara en un billete de doscientos mil pesos -, de haberle robado un Rolex. Es irónico, pero pues así paga el diablo a quien bien le sirve. Ver acá.

Al parecer, para éste señor - si se le puede decir así - cuya sinvergüencería tiende a infinito y busca la forma de hacerse a una borona de poder, necesita protagonismo a como de lugar; ya sea en dudosos atentados de propaganda que son aprovechados por su patrón, tras un micrófono haciendo señalamietos y destilando el odio que necesita éste país para seguir en el barrial en el que anda o desviando la atención de sus robos e inhabilidades, las cuales vive apelando ante su gran amigo, monseñor procurador, para que le deje retornar a cargos públicos desde los cuales pueda seguir sembrando su odio haciendo pantalla para poder seguir enriqueciéndose a costa del bolsillo de todos nosotros.

Se sospecha que a éste individuo le duele la pérdida de su reloj Rolex y que debe ser que lo compró con la plata que le robó a Invercolsa haciendose pasar por un empleado que no era, delito que en un país justo debería castigarse con cárcel y no con ministerios o audiencia radial alguna.

Esperemos que sus inhabilidades e impedimentos por ladrón, embustero, mentiroso, estafador, instigador y calumniador se mantengan, a menos que - Dios y monseñor procurador no lo quieran - aparezca Ferleyn (severo nombre ñero) el exitoso tesista de derecho de la Parking's University y le haga el milagrito teniendo como argumento un análisis producto de "discusiones de clase".

Bueno, esperemos con prontitud que Dania saque una foto en su Facebook con su nuevo Rolex. La 22.