"¿qué es lo que quiere la nena? ¿qué va a pedir la princesa? ¿qué se le antoja a la reina? dígalo pronto chica gomela..."Hace meses como muchos, como tantos y hasta el punto en el que la pasión política nos hizo como tontos, hice parte del movimiento que tomaba la iniciativa de los programas bandera que tuvieron impacto en las últimas alcaldías de Bogotá conocido como Ola Verde.
Y como ustedes mis querid@s lectores pudieron observar, a lo largo de la campaña dispuse de mi tiempo, líneas y plataforma desparchado-bloggera para impulsar a la ola y así poner a surfear al pequeño Mockus. Un ejemplo. Otro Ejemplo.
Y como muchos, me dio duro el choque en las urnas cuando en las encuestas todo lo pintábamos cuál cuento de hadas.. y nos hicimos llamar mamertos por uribestias y por izquierdistas.. y si, nos identificábamos y queríamos un país algo decente luego de ocho años de disentería política y de lentejismo de alto grado.
Y es que no era para menos, la verdad, ¿qué se podía esperar de mi? un joven ingeniero del segundo escalón, de crianza liberal, de convicción de izquierda hasta cuando Samuel Moreno lo defraudó con sus escándalos, ineptitud e ineficiencia y Petro con su apoyo a una rata religiosa como procurador... no estábamos en calidad de tratar de elegir a otra persona que no nos llenara un trisito el vacío ético que nos había quedado después de tantos años de sinsabor.. sin embargo, fracasamos.
Y es que el fracaso no quedó como el fracaso en las urnas, sino que también fue fracaso con la fácil fragmentación y el retorno del clásico lentejismo del cuál ha sido víctima la política capitalina: El delfín Peñalosa.
La verdad no se que se le puede pedir más, si peras a un olmo o una inclinación política definida a éste individio, quien no hace más sino despotricar del actual #Bobolitro pero que no permite que le hagan observaciones a sus ligeros errores, dícese: Transmilenio (lozas, ineficiencia, accidentalidad, obselencia, sobrecosto, paño de agua tibia en materia de movilidad, el transporte sigue en manos de los grandes transportadores), Bolardos, el lío del Coconito.. entre otros.
Entre otras es irónico que éste tipo, después de megapoposeadas como las lozas de Transmilenio y las jugosas contrataciones con Cemex y los contratistas a costa del bolsillo capitalino, sea el candidato más opcionado para dirigir las riendas de la ciudad y que sólamente Samuel Moreno se lleve el agua sucia de la historia, sin embargo es guerra de delfines.. y entre hijo de ministro de agricultura y nieto de ex presidente, el primero tiene más goma en los medios que lo acomodan todo a conveniencia.
Ni que hablar de quienes están pendientes del guiño de éste camorrero hacia el exalcalde, entonces, ya no estamos con el pensamiento verde de "no todo vale", y haremos combo.. mejor, gallada o co-equipo con los mismos que repartieron la torta con Moreno Rojas y cuando llegó a los medios el escándalo de corrupción han salido a lavarse las manos.
Entonces si ya no es Ola Verde, si se volvió un Tsunami con ratas, como que ya para que.. si se convirtió en pesca de río revuelto éso ya no inspira confianza y mejor apague y vámonos. Chao Ola Verde, fue un gusto haber hecho parte de una opción diferente, pero lo que se gesta hoy es un Tsunami que arrasará conciencias cual edificaciones y carros en las costas japonesas.
Posdata: las diferencias entre Moreno y Peñalosa parecen más de donde nacieron que a quien le sirven.. revisen en Wikipedia.. ni siquiera nacen acá y vienen a "gobernar".
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