martes, agosto 31

Se nos fue un Niño más

Relfexión personal: el niño interior no es nuestra inmadurez, es la vocación de ser tiernos, inocentes y recursivos, de robar una sonrisa cuál pétalo fuera, de hacer sentir halagada a una persona, es saltar tras los sueños como si atrapáramos una mariposa siendo adultos en nuestro caminar.

Fusilado de Semana, quien a su vez lo fusiló de "Alegría de querer" de Jairo Aníbal Niño (1941-2010);

¿Me haces un favor?

-¿Me haces un favor?-
-¿Qué clase de favor?-
-¿Quieres tenerme mis avioncitos durante todo el recreo?-
-¿Durante todo el recreo?-
-Sí, es que tú eres mi cielo-

Se fue el Niño más viejo de éste país, el hombre que dedicó su vida a su apellido y mantuvo su niño interior vivo en sus letras. Ya hoy yace bajo tierra el Niño más grande de Moniquirá, el Niño de un pueblo de clima templado tropical de la cordillera oriental en donde se mezclan el olor a guayaba y café en plena frontera entre la carranga boyacense y la guabina que suena de Vélez y Barbosa hacia el norte hasta llegar al Chicamocha grande donde se hacen ecos la voz de los Guanes que alguna vez poblaron ése altiplano.

Creo que si el gobierno de Colombia fuera de verdadera Unidad Nacional y no de unidad de políticos, nuestros jóvenes deberían conocer a Zoro, El cristo de espaldas, El Parnaso Colombiano, María, Tránsito, Cuentos de Tomás Carrasquilla, El bazar de los Idiotas, Maqroll el Gaviero, Ilona llega con la lluvia, Crónica de una muerte anunciada, El general en su laberinto entre otras cosas útiles que no se parezcan a pendejadas como las de Gustavo Bolívar o basura televisiva como "El Cartel de los Sapos", "La Marbelle-grafía" o "El Capo" que en vez de construir país han sembrado su cultura mafiosa y su culto a la mundanidad más baja con imágenes de manes delincuentes que consiguen todo a lo fácil o a las patadas y de viejas que son solo culo y tetas mas no cabeza y sentimientos que es a la larga lo que un hombre busca en una mujer.

Tal vez tengo la parte de lectura abandonada, sin embargo me gustaría leer a Jairo Aníbal cuando acabe el trabajo de grado, pueda que éste hombre que no solo tiene un Niño por apellido me enseñe através de la lectura algo que todo colombiano debe vivir: "La alegría de querer".

Se debería hacer obligatoria la lectura de aquellos colombianos que escribieron para hacer cultura y no para hacer crónica de la enfermedad del país, creo que se debería mejor leer un libro a ver las noches de RCN, es increíble que un día después del deceso de Jairo Aníbal me haya tocado buscar por Google la noticia ya que los titulares de los medios por Internet están llenos de sangre y enfrentamientos entre los lagartos de turno.

Se nos fue un Niño más, sin embargo aún no nos inmutamos ya que dejamos morir a nuestros niños con las balas de la Comuna 13 o con los "paseos de la muerte" en la sala de urgencias de un hospital, ojalá no dejemos morir a más de ellos.

"La imagen la fusilé de no se dónde.. pero se ve tan bacana"

No hay comentarios:

Publicar un comentario

incorrectos comentarios